Suelo Pélvico

El suelo pélvico comprende todo el tejido que tapiza la pelvis en su parte más inferior. Entre sus funciones se encuentra la continencia (urinaria como fecal), sostén de las vísceras, buena sexualidad y facilitar proceso de parto. Por tanto, ¿Cómo se si soy susceptible de tratamiento de suelo pélvico?

Si padeces:

  • Pérdidas de orina, gases o fecales.
  • Urgencia miccional o vejiga hiperactiva.
  • Infecciones de orina recurrentes.
  • Prolapso de uretra, vejiga, útero o recto.
  • Estreñimiento.
  • Fisuras o hemorroides.
  • Dolor pélvico crónico.
  • Dolor, sensibilidad o cualquier otro síntoma relacionado a la salud hormonal-menstrual.
  • Dolor en las relaciones o vaginismos.
  • Diastasis abdominal.

Además es importante tratamiento de suelo pélvico en casos de:

  • Postparto (cicatrices: desgarro, cesárea y episiotomía).
  • Embarazo (preparación del abdomen y el periné, paliar o eliminar dolores asociados al cambio postural, ejercicios de dilatación y expulsivo para afrontar el día del parto con más seguridad).
  • Tras cirugía por histerectomía, miomas, pólipos, endometriosis, etc.
  • Si estás en proceso de búsqueda de embarazo.
  • Síntomas asociados a la menopausia.